Muchas noches de esta la que considero mi todavía corta vida he pensado mientras intento quedarme dormida si lo que viví ese día o esa semana o ese mes fue preparación para algo "especial" mucho más grande.
Seguro que todos hemos pensado ¿para qué estamos en este planeta?, ¿porqué algunas cosas que queremos las podemos tener y muchas otras no? Ese tipo de preguntas que nos hacemos cuando estamos en un momento crucial de nuestras vidas o de esos que dejan impacto para siempre.
Bueno, mi sabia madre siempre me ha dicho que todo pasa por algo, que todo tiene una razón de ser. La verdad es que hace mucho que yo le creo por completo.
Y en esta ocasión, durante estos días (desde el martes que recibí una interesante propuesta y es que vengo dándole vueltas al asunto) he pensado que muy seguramente el destino y ese ser supremo en el que creo, me han llevado a tomar decisiones durante estos 28 años para llegar a este punto exacto.
No sé que vaya a suceder. Como con lo de Latin American Idol (que ya todos saben en qué terminó), yo no lo pedí pero si solito vino yo responderé y esperaré a ver qué sucede. Siguiendo el principio de que "todo pasa por algo". Seguramente es que Xto! me dio un don en la garganta, luego me hizo estudiar C. de la Comunicación, me empujó a terminar de publicista y me ayudó a no deshechar y olvidar una buena amistad de tanto tiempo -para llegar a esto-
Si es que resulta que "esto" es para mi, les podré contar en un par de meses de qué se trata. Si no, igual les estaré contando. Lo único que puedo decir por ahora es que el sueño de toda una vida de poder conocer las tierras del abuelo materno, de saborear mis raíces y poder destacar un tercio de lo que traigo en la sangre, está muy cerca (aunque a la vez muy lejos).